¿Hay vegetales que vuelan?

No hay vegetales capaces de emprender el vuelo y moverse después a voluntad por el aire. Pero sí existen plantas que se reproducen gracias al viento que transporta semillas y polen.

Para facilitar la labor del viento y asegurarse de que nazca el mayor número posible de nuevas plantas, algunas semillas tienen «trucos» que les permiten volar más lejos o con mayor facilidad.
Por ejemplo, el polen, que es un tormento para quienes padecen alergia, está formado por pequeñísimos granos que, para favorecer el transporte aéreo, se hallan provistos en algunos casos de bolsitas llenas de aire que les permiten volar más lejos.

El polen lo forman las células reproductoras masculinas que, para dar origen a una nueva planta, han de «encontrar» células femeninas con las que… crear una familia. Por este motivo necesitan volar lejos de la planta madre.

El olmo y el arce, en cambio, producen frutos alados llamados sámaras, provistos de un ala que facilita el trans¬porte aéreo y los conduce hasta lugares apartados de la planta madre, en donde encontrarán espacio para crecer.